Definimos alimento de
conveniencia como cualquier plato total o parcialmente preparado en el que una
parte significativa del tiempo que deberíamos dedicar a la preparación del
alimento es asumida por el fabricante, el procesador o el distribuidor, liberando de esta tarea al consumidor.
Pertenecen a este grupo de alimentos los platos preparados, los precocinados y
toda una nueva gama de productos que podemos encontrar mínimamente procesados.
En este momento en el mercado encontramos muchos tipos
diferentes de Convenience Food que
clasificaremos en:
PRIMERA GAMA: Son los
alimentos frescos y los que han sido conservados mediante métodos de
conservación como el secado, salazón y fermentación.
SEGUNDA GAMA : Son
aquellos que han sido sometidos a un tratamiento térmico para su conservación ,
normalmente una esterilización a temperatura por encima de los 100 ºC y se han envasado en recipientes adecuados y herméticamente
cerrados , ya sean de metal - latas o envases de cristal . En este tipo de presentación podemos
encontrar alimentos crudos o platos ya preparados y esterilizados (Ej. la
fabada). Son productos que se conservan durante un lago periodo de tiempo a temperatura ambiente. Se pueden consumir fríos
o calientes en función del alimento. Este grupo también se denomina conservas.
TERCERA GAMA: Son los
productos conservados mediante la aplicación de frió, congelados (- 20º C ) o ultra
congelados ( - 40º C ) .
Como productos de tercera
gama podemos encontrar alimentos simples sin manipular como pescado , carne , verduras … o platos ya
preparados o semipreparados, croquetas , pescados rebozados , patatas prefritas
, pizzas , salteados , verduras braseadas …
La mayor parte de estos
platos están sometidos a un precocinado que no es completo, se congelan y para
ser consumidos se debe completar el tratamiento culinario en el horno, micro, sartén…
CUARTA GAMA: Son
alimentos frescos, limpios, pelados, troceados y envasados para su consumo
inmediato. Son productos que no han sido sometidos a ningún tratamiento térmico por lo que se deben
mantener refrigerados y tienen un periodo de caducidad corta (entre 7 y 10 días).
Se suelen envasar en bolsas, bandejas, tarrinas… que los protegen de
contaminaciones ambiéntales y facilitan su conservación.
Dentro de esta gama también
podemos encontrar productos envasados en atmósferas modificadas, este proceso
consiste en reducir la concentración de oxigeno al envasar el alimento lo que
inhibe el crecimiento de microorganismos y reduce la respiración del alimento
retrasando o enlenteciendo los procesos naturales de alteración que se producen
con el paso del tiempo. Este tipo de envasado se utiliza en las verduras y hortalizas solas (champiñones) o mezcla de ellas (ensaladas
variadas).
QUINTA GAMA: Son
alimentos ya cocinados, que se comercializan envasados y refrigerados. Para su
consumo necesitan calentamiento previo en horno , microondas … en el envase
donde se adquieren o en un recipiente convencional ( recipiente de barro . cristal, acero , silicona…) . Su fecha de caducidad suele ser mayor que
los de cuarta gama (entre 2 y 3 meses). Suelen comercializarse en atmósferas
modificadas o envasadas al vació para prolongar su vida útil.
Son ejemplos de esta gama
las pizzas refrigeradas, todo tipo de pastas, lasaña, macarrones…
En el mercado podemos
encontrar el mismo alimento en varias o
todas las gamas posibles. Como ejemplo
utilicemos los champiñones que podemos encontrar en el mercado frescos (
primera gama ) , enlatados ( segunda
gama , conserva ) limpios , laminados y
congelados ( tercera gama ) en fresco ,
limpios , laminados y envasados ( cuarta gama )
formando parte de un plato ya cocinado y listo para comer después de
calentar como en un guiso de carne o en un plato de pasta con champiñones (
quinta gama ) . Un gran abanico de opciones que nos presenta la industria alimentaria.
Es muy importante antes
de consumir estos alimentos leer las instrucciones
del fabricante que van impresas en el envase.
No romper la cadena de frío
del producto si se trata de tercera,
cuarta y quinta gama.
La compra debe comenzar por
los alimentos no perecederos, seguir con los frescos y terminar con los refrigerados y congelado, trasladarlos en una bolsa térmica y guardarlos
en el frigorífico frescos o congelados al llegar a casa.
Rechazar los alimentos
que tengan el envase roto, deteriorado , las latas de metal abolladas , las de vidrio que al abrir no hagan el característico
“ Pop “, garantía de que está en perfecto estado para su consumo .
Siga siempre para la
cocción las instrucciones del envase que recomienda el fabricante.
Respete las fechas de
caducidad de los productos.
Consuma totalmente el
producto después de abierto. Si se puede mantener en el frigorífico, una vez
abierto, no sobrepase el tiempo que
recomienda el fabricante.
Es muy importante
aprender a leer la información
nutricional de estos productos , especialmente los que ya van cocinados , para seleccionar los mas saludables o aptos
para cada consumidor en función de sus necesidades , patologías , alergias , etc.
Isabel Armengot Montagud. Médico. Master en Dietética
y Nutrición Humana.
Diploma postgrado Nutrición.